La Ruta de la Carne, una experiencia pampeana

La cadena de valor de la carne se suma al turismo gracias a una iniciativa nacida en La Pampa, que busca promover trazabilidad, gastronomía de calidad e identidad estableciendo lazos entre los sectores turísticos y productivos.

Que el territorio de la República Argentina es vasto y diverso no se discute: los operadores de viajes diseñan los traslados entre los puntos de mayor interés teniendo en cuenta la relación tiempo /distancia / costos. Pero también, al personalizarse la demanda turística –un sello distintivo del siglo XXI– se redefine el concepto de “punto de interés”. Y está claro que la gastronomía va ocupando un lugar bien ganado entre las preferencias de los viajeros, por ejemplo, en las rutas del vino, patrimonio de varias provincias entre las que se destacan Mendoza y Salta.

Ante este panorama alentador, los hermanos Tito y Alan Lowenstein, propietarios del frigorífico Pico y de la exclusiva marca de carne Ohra Pampa, galardonados como Marca País, idearon la Ruta de la Carne, una propuesta turística y gastronómica donde la excelencia cárnica es protagonista, típica de la pampa argentina y más precisamente de la provincia de La Pampa, cuya riqueza del suelo, diversidad climática y ecosistema la consolidan como la Provincia Argentina de la Carne de Calidad.

Fue la sinergia entre varios agentes la que le dio impulso y forma a este programa de fomento que pone en valor la riqueza ganadera y frigorífica pampeana, a través de la generación de vínculos entre los sectores productivos, turísticos, gastronómicos, culturales y académicos.

“La Ruta de la Carne busca inspirar a más destinos a posicionarse como atractivos turísticos, generando orgullo nacional, empleo, divisas y nuevas oportunidades”

Una cadena de valor

Con la proyección de un vibrante spot que “desde el corazón del país” ofrece un mapa de experiencias para los cinco sentidos, la propuesta se presentó en la Feria Internacional de Turismo (FIT) 2023 en Buenos Aires, con el apoyo y la participación de la Secretaría de Turismo de La Pampa; y por supuesto, con la colaboración de productores, transportistas, frigoríficos, estancias turísticas, hoteles, hostales, guías y otros prestadores de servicios. El objetivo es posicionar y desarrollar el turismo en la provincia de La Pampa para aprovechar los beneficios del impacto positivo económico y social que produce y, sobre todo, crear empleo genuino.

A lo largo de la geografía de la provincia, se dibuja un itinerario de estancias, hoteles, hostales, restaurantes y establecimientos, entre los que se encuentran Estancia Villaverde, Estancia Nehuen Mapú, Hostal Naicó, Hotel Mercure, Hotel La Campiña, Terra Pampa Lodge, Estancia La Holanda y Hoyo 19. Generando una trazabilidad productiva (del campo a la mesa), cada uno de ellos se distingue por un corte de carne seleccionado y cuidadosamente preparado, supervisado por los chefs embajadores de Ohra Pampa, los hermanos Claudio y Ricardo Belfiore, para que cada establecimiento mantenga la calidad de la carne a través de sus técnicas de cocción.

La contundencia de la propuesta se traduce en eventos como el Meet Up, un encuentro de empresas cuyo objetivo es crear y fortalecer lazos, generar nuevos clientes, descubrir proyectos y participar de capacitaciones para potenciar su desarrollo. Este año, uno de los temas centrales fue la participación del Ente Patagonia en la próxima edición de la Feria Internacional de Turismo (FIT) que se realizará del 28 de septiembre al 1 de octubre de 2024. Allí se evidenciará el compromiso de las provincias patagónicas de trabajar en conjunto para promover el turismo y generar desarrollo económico. La provincia de La Pampa tendrá un espacio destacado para mostrar su oferta turística, con un enfoque especial en aquellos atractivos que la distinguen a nivel nacional e internacional.

La Ruta de la Carne busca inspirar a más destinos a posicionarse como atractivos turísticos, generando orgullo nacional, empleo, divisas y nuevas oportunidades, pero también vivencias únicas para los viajeros. “Hay una hora de la tarde en que la llanura está por decir algo…”, decía Borges. Y el deseo es que, gracias a la dedicación de su gente, La Pampa deje en sus visitantes un mensaje inolvidable. 

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