Las 10 mejores playas de Europa
El Viejo Continente tiene paisajes de mar para todos los gustos. Desde la exótica playa islandesa consagrada como la mejor del mundo hasta los azules transparentes del Mediterráneo, aquí una selección imperdible para agendar en un viaje.
Sobre gustos no hay nada escrito, y sobre playas… hay mucho. Cada uno imagina un paisaje a su manera cuando se trata de costas, desde las clásicas palmeras que nacen al borde agua turquesa en el Caribe hasta las olas gigantes para los surfistas en el Pacífico, o los muchos azules que se dan cita en las aguas del Mediterráneo. Una de las clasificaciones más populares es la que cada año da a conocer TripAdvisor, red social de viajes donde millones de viajeros opinan cada año sobre los lugares visitados y las experiencias vividas. La clasificación 2023 de las mejores playas del mundo, según la plataforma, distingue a ocho europeas entre las primeras 25: ¿cuáles son y por qué resultan sorprendentes incluso para los viajeros más avezados?
Reynisfjara Beach Vik, Islandia
Primera playa europea en la clasificación, ocupa el puesto cuarto en el listado general. Está ubicada en la costa sur de la isla y se distingue por sus arenas negras, herencia de las erupciones volcánicas que han modelado el paisaje islandés. Se encuentra junto a Vik í Myrdal, el pueblo más meridional de Islandia continental y se destaca por sus pilares de basalto y las poderosas olas del Atlántico. Fue destacada por National Geographic como una de las diez mejores playas no tropicales del planeta.
Playa de Falésia Olhos de Água, Portugal
Sexta en el listado general, segunda entre las europeas, la playa de Falésia -que significa “acantilado”, el elemento geográfico más distintivo de la costa del Algarve portugués- comienza en Olhos de Água, Albufeira, y se extiende a lo largo de unos ocho kilómetros hasta Vilamoura. Los acantilados la protegen durante todo el recorrido, entre calas y grutas. El paisaje es rojizo y blanco, y ofrece espectaculares vistas de los alrededores desde los pinares que coronan el conjunto.
Isola dei Conigli Lampedusa, Islas de Sicilia
Número 15 general, cuarta europea, es tan bella como elegante. De forma semicircular, se puso de moda en 1845 cuando la reina Isabel II empezó a tomar aquí baños de mar. La “perla del Cantábrico”, como se la suele apodar, fascina porque completa la belleza de la ciudad y revela toda la furia de las olas en la célebre escultura “El peine de los vientos”, de Eduardo Chillida, que corona uno de sus extremos. Se caracteriza por las arenas doradas y las aguas poco profundas.
Playa de La Concha San Sebastián – Donostia, España
Octava en la clasificación de TripAdvisor, quedó tercera entre las mejores playas de Europa (alguna vez ocupó los primeros puestos a nivel mundial). Frente a esta playa de la pequeña isla de Lampedusa tenía su casa Domenico Modugno, que inmortalizó el azul del Mediterráneo en su canción “Volare – Nel blu, dipinto di blu”. Desde lo alto del acantilado se ve una porción de tierra semejante a una isla que se adentra en el mar, salpicada de vegetación y con playas a ambos lados: cuando se baja hasta la arena, es posible sumergirse en las increíbles aguas transparentes y cálidas de Lampedusa.
Playa de Muro Playa de Muro, España
Quinta europea, decimoséptima de las 25 primeras del mundo para TripAdvisor. Aguas de color turquesa y playas de arena fina la convierten en un paraíso terrenal ubicado en la isla de Mallorca. Sus cinco kilómetros de extensión y 25 de ancho son ideales para el relax de una puesta de sol pero también para las actividades deportivas. Es de escasa profundidad y poco oleaje, por lo que se ha convertido en una de las favoritas de las familias.
Falasarna Beach Falasarna, Grecia
Se trepó al puesto 21 entre las 25 mejores del mundo, y es la sexta del total ubicada en Europa. Se encuentra en el oeste de Creta, sobre el cabo de Gramvousa, y se extiende a lo largo de tres kilómetros. La playa se distingue por el viento, precisamente el punto que atrae a los amantes del surf o el windsurf hasta sus arenas bañadas por aguas color turquesa. Tiene varios sectores -Pacheia Ammos, Livadi, Kolimbito, Kalami, Limanaki- y tiene la ventaja de estar en una zona de fácil acceso, aunque protegida.
Nissi Beach Ayia Napa, Chipre
En la lista general es la 22, y la séptima de las europeas. Esta playa chipriota toma el nombre del pequeño islote de Nissi, que se encuentra cerca de la costa y al que se puede llegar a pie gracias a las aguas poco profundas. La playa es muy popular y tiene actividades deportivas abiertas al público; también permite practicar esquí acuático y windsurf. La calidad del agua y el cuidado del medio ambiente le van la distinción internacional de bandera azul.
Balos Lagoon Kissamos, Grecia
Grecia vuelve al listado en el octavo lugar de las más bellas playas europeas (25 en el ranking global de TripAdvisor). Balos se encuentra 17 kilómetros al norte de Kissamos, entre el cabo Gramvousa y el pequeño cabo Tigani, nuevamente en Creta. Exótica, agreste, de aguas turquesas y arenas rosadas, es muy concurrida en julio y agosto (incluso se recuerda el paso del príncipe Carlos y la princesa Diana en su yate). El mar aquí es cálido y poco profundo, ideal para ser apreciado en la tranquilidad de la mañana.
Luskentyre Beach Escocia, Reino Unido
Aunque no figuró entre las mejores seleccionadas este año, esta playa escocesa es habitué del ranking. Cuenta con kilómetros de arena blanca y hermosas aguas verdeazules, con impresionantes dunas y vistas a la isla de Taransay, famosa por ser el escenario de la serie de la BBC “Náufrago”. En los alrededores se pueden practicar senderismo, ciclismo y muchas otras actividades. Entre la playa y la carretera principal se puede recorrer un camino de cinco kilómetros con vistas espectaculares del entorno.
Plage du Sillon Saint-Malo, Francia
En Bretaña, oeste de Francia, esta décima playa con la que cerramos la lista está ubicada sobre la Mancha y es ideal para practicar deportes de viento como windsurf y velerismo. Se extiende a lo largo de tres kilómetros, dividida en la Grand Plage, la playa de la Hoguette y la playa de Rochebonne, protegidas de la fuerza de las olas por una serie de espigones. Al pie de la ciudad antigua y sus fortificaciones, es ideal para combinar la naturaleza con la belleza del centro histórico de Saint-Malo.