Lençóis Maranhenses, nueva estrella de Brasil en el Patrimonio Mundial
La Unesco incorporó al parque nacional brasileño como Patrimonio Natural de la Humanidad. El destino, zona de transición entre el cerrado, la caatinga y la selva amazónica, es uno de los favoritos de los turistas internacionales.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) concedió el título de Patrimonio Natural de la Humanidad al extraordinario Parque Nacional de Lençóis Maranhenses, tal como se anunció a fin de julio después de la evaluación de 27 sitios globales realizada en Nueva Delhi.
Fenómeno natural único en el mundo, los Lençóis Maranhenses están situados en una zona de transición entre el cerrado, la caatinga (un bioma exclusivo de Brasil) y la selva amazónica.
Brasil postuló a los Lençóis en 2023, seguro de que cumplía todos los requisitos que evalúa la Unesco para sumarlo a su Patrimonio Natural: entre ellos, la belleza natural de la región y sus dunas, los límites y la protección de la zona, la actuación de los proveedores de servicios turísticos de la región y el plan de gestión del parque.
Además del nuevo parque, Brasil cuenta con otros siete sitios del patrimonio natural reconocidos por la organización. Son los siguientes: Complejo de Áreas Protegidas del Pantanal, Complejo de Conservación de la Amazonia Central, Costa del Descubrimiento: Reservas de Mata Atlántica, Islas Atlánticas: Fernando de Noronha y Atol das Rocas, Parque Nacional de Iguaçu, Reservas de Mata Atlántica, Reservas de Cerrado: Parques Nacionales de Chapada dos Veadeiros y Emas.
«Maranhão ya es uno de los destinos más populares para los turistas internacionales en Brasil, especialmente por las alternativas de naturaleza y aventura en los Lençóis Maranhenses. Este reconocimiento de la Unesco también refleja un Brasil que ha vuelto, preocupado por el medio ambiente, la naturaleza y la sostenibilidad», dijo el presidente de Embratur, Marcelo Freixo, cuando se conoció la inclusión del destino en el listado del Patrimonio Mundial.
El objetivo de Brasil ahora es implementar acciones que amplíen la promoción turística en el estado. Entre ellas, mejorar la conectividad aérea, divulgar los destinos de Maranhão en ferias internacionales en el segundo semestre del año y, en 2025, destacar los Lençóis Maranhenses en la campaña publicitaria de la agencia en Estados Unidos.
Estados Unidos es el país que más turistas envía a Maranhão. Los estadounidenses representan el 18% del total de visitantes, seguidos de los turistas de Portugal, Italia, España y Alemania. En general, estos turistas permanecen 22 noches o más en el destino (34,8%) y viajan solos (45,6%) o en pareja (27,4%).
Para llegar a Maranhão, la mitad de los viajeros hacen una conexión y el 41% hacen dos. Las principales puertas de entrada nacionales son Guarulhos, en São Paulo (51%), y Brasilia, en el Distrito Federal (5,4%). Las principales compañías aéreas que operan en el estado son Latam (64,4%), Gol (10,9%) y Azul (6,5%).
¿Cómo son los Lençóis Maranhenses?
El paisaje de la región se distingue por las enormes dunas de arena blanca que se extienden hasta donde alcanza la vista. Su color blanco puro contrasta con el cielo azul y el agua turquesa de las lagunas que se forman entre la arena, alimentadas por las lluvias. Estas lagunas son de un color turquesa intenso y ofrecen la oportunidad de nadar y relajarse en un entorno natural único.
Aunque el paisaje parece árido, alberga una rica biodiversidad. Durante la temporada de lluvias, la vegetación florece y se pueden observar diversas especies de aves, reptiles y mamíferos.
Pueblos como Barreirinhas y Atins sirven como base para explorar el parque. En estos lugares hay alojamiento, restaurantes y agencias de turismo que ofrecen excursiones a los Lençóis, que se pueden explorar en paseos a pie o en buggy, la modalidad más popular para llegar hasta las mejores lagunas y miradores.
La mejor época para visitar los Lençóis Maranhenses es durante la temporada de lluvias, entre junio y septiembre, cuando las lagunas están llenas de agua. Sin embargo, durante la temporada seca, entre diciembre y mayo, también se puede disfrutar de un paisaje diferente, con dunas más altas y menos vegetación.