Los 12 imperdibles de Bariloche para el verano 2023
La capital turística de la Patagonia se disfruta gracias a una infraestructura y una oferta excepcionales, en el magnífico entorno natural del Parque Nacional Nahuel Huapi.
1 – Paseo a Puerto Blest y Lago Frías en catamarán
Puerto Blest fue el núcleo original del Parque Nacional Nahuel Huapi. Se puede llegar desde Puerto Pañuelo en una excursión lacustre que recorre el Brazo Blest. De camino, se observa cómo cambia el ecosistema y se adentra hacia la fresca selva valdiviana.
2 – Día de playa y kayakismo
Los lagos Nahuel Huapi, Moreno, Gutierrez, Mascardi, Guillelmo, Steffen y Martin cuentan con playas lacustres y aguas transparentes. Se puede acampar en los predios autorizados, cerca del agua. Varios prestadores alquilan u organizan salidas con kayaks.
3 – Subir a un refugio de montaña
Bariloche cuenta con una red de cuatro refugios: López, Manfredo Segre (Laguna Negra), Frey y General San Martín. Además, están los del Cerro Tronador: Rocca, Ilon y
Otto Meiling. La famosa carrera de los 4 refugios del Club Andino Bariloche incluye el López (Cerro López), el Frey (Cerro Catedral), el San Martín (Laguna Jakob) y el Italia (o Manfredo Segre, Laguna Negra – Cerro Negro). Los senderos de acceso a cada uno son aptos para caminantes de nivel intermedio.
4 – Visitar el Bosque de Arrayanes y la Isla Victoria
Se llega desde Bariloche por medio de excursiones lacustres. El bosque está sobre la península Quetrihue, en las cercanías de Villa La Angostura, sobre la orilla neuquina del lago. Se navega a continuación hasta el Puerto Anchorena de la Isla Victoria, para conocer la Playa de Toro y un sitio con pinturas rupestres hechas por los pueblos originarios. Hay una opción de glamping para pernoctar en la isla.
5 – Cabalgatas por la estepa patagónica
Varios prestadores proponen circuitos en los distintos ecosistemas de la región: en los bosques cordilleranos, entre los mallines inundados o por la inmensa estepa de la meseta patagónica.
6 – Canopy en el bosque
Bariloche cuenta con un circuito de 1,5 km (entre los más largos de América Latina) que se puede hacer de día como de noche. El circuito en altura, permite caminar entre las copas de los árboles, descubriendo el bosque desde nuevos ángulos.
7 – Opciones de trekking
Bariloche cuenta con una de las mayores redes de senderos preparados para el turismo en los Andes. Esta actividad no exige experiencia previa cuando se practica bajo la supervisión de un guía de alta montaña, pero sí requiere de un nivel físico aceptable y una buena
predisposición hacia las eventualidades que puedan surgir en cada expedición.
Es fundamental obtener información precisa sobre el estado de los senderos y sus
diferentes niveles de dificultad. Además, si el recorrido se encuentra dentro del
parque nacional Nahuel Huapi, es necesario registrarse con anticipación.
8 – Rafting y flotadas en los ríos
El límite sur del Parque Nacional Nahuel Huapi está marcado por el Río Manso, donde se organizan experiencias de rafting. Se proponen también flotadas en el río Limay.
9 – Navegar a bordo de un velero
Desde Bahía López hacia el Brazo Tristeza; desde la ciudad hacia el Brazo Campanario; desde Puerto Pañuelo hacia la Isla Victoria: varios veleros organizan navegación por las aguas del Nahuel Huapi. Los vientos constantes son ideales para disfrutar de este deporte y modo de explorar la magnífica naturaleza del parque nacional.
10 – El clásico Circuito Chico
Se trata del recorrido más tradicional de Bariloche, que atraviesa bosques, lagos y montañas. En camino se visitan la Capilla San Eduardo y varios puntos panorámicos.
11 – Disfrutar de la gastronomía barilochense
Las opciones son múltiples y cada una más rica que la otra: chocolates, cordero patagónico, cervezas artesanales, curanto, trucha, ahumados, frutos rojos, etc. La gastronomía de Bariloche es toda una experiencia en sí misma. Los chefs más reconocidos de la región se lucen con platos de autores o con recetas que se convirtieron en clásicos.
12 – Pasear a bordo del tren patagónico y La Trochita
El Tren Patagónico une Bariloche con Viedma, cada fin de semana y permite llevar vehículos. Este año, se rehabilitó parte del tramo de La Trochita, el mítico Viejo Expreso Patagónico, que unió Ingeniero Jacobacci con Esquel durante buena parte del siglo XX. La locomotora y los vagones forman un verdadero museo rodante. . Esta experiencia comienza en Ingeniero Jacobacci, a 200 kms de Bariloche, y termina en Ojos de Agua, luego de un viaje de 43 km.